Es una gran pirámide de lisas placas tumbadas de caliza gris situada justo en frente de la estación de Gourette. La roca varía desde una excelente caliza muy compacta y adherente surcada por canalizos y fisuras hasta paños de una calidad deplorable de roca escamosa que se deshace de mirarla.
Aproximación
Durante el verano se puede dejar el coche en la misma plaza del pueblo, frente a la oficina de turismo (que solo abre por las tardes) y subir por la pista verde La Balade. Al final de esta, buscaremos una caseta de ganado y hacia la derecha por una rampa herbosa hasta un collado. El pie de vía está marcado con un palo de la estación de esquí de color verde, y al acercarnos veremos una flecha roja y una placa con el nombre de la vía.
Si la barrera de la estación de esquí está abierta, se puede subir en coche hasta más arriba. Desde la plaza de Gourette, mirando a la oficina de turismo, seguir hacia la derecha pasando un tunel, a la derecha se pasa la barrera de la estación y se toma la primera pista de la derecha, pasando junto a un hotel, se sigue la pista en ascenso y tras unas cuantas curvas se llega hasta el final de un telesilla con un restaurante de la estación. Un poco más arriba de este, cerca de una caseta de ganado, hay una explanada donde se puede dejar el vehículo. Según nos dijeron, si dejamos el coche varios días puede que nos pinchen las ruedas. Desde esta explanada, seguir la pista que bordea una colina y cuando se acaba la pista, solo hay que remontar una rampa de hierba hasta el pie de vía. (20 minutos)